Estoicismo cotidiano

by Ryan Holiday y Stephen Hanselman

366 reflexiones sobre la sabiduría, la perseverancia y el arte de vivir.

Podcast episodes

  • Season 1

  • Agosto 1

    Agosto 1

    No aspires a la perfección ¿Es amargo el pepino? Échalo. ¿Hay zarzas en el camino? Desvíate. Eso basta. No prosigas diciendo: ¿Por qué se hicieron estas cosas en el mundo? De otra manera, serías la burla del hombre que estudia la naturaleza, como se te reirían el carpintero o el zapatero si les reprocharas porque ves en sus talleres aserraduras y retazos de las materias que trabajan, aunque tienen donde arrojarlos. Pero la naturaleza del universo nada dispone fuera de sí. MARCO AURELIO, Meditaciones, 8.50

  • Julio 31

    Julio 31

    La dicha estoica Créeme, el gozo verdadero es cosa seria. ¿Juzgas, acaso, que alguien de aspecto disoluto y... "divertidillo" va a menospreciar la muerte, abrir sus puertas a la pobreza, poner freno a los placeres, ejercitarse en la tolerancia del dolor? Quien aplica a sí mismo estos principios, disfruta de un gozo inmenso, aunque poco atrayente. Quiero que te halles en la posesión de este gozo; nunca te faltará una vez que hayas encontrado la fuente que lo sustenta. SÉNECA, Epístolas morales a Lucilio, 23.4

  • Julio 29

    Julio 29

    Un antídoto para el espíritu Quien practica la filosofía como antídoto de su espíritu, resulta magnánimo, lleno de confianza, invencible y más elevado cuando uno se le acerca. SÉNECA, Epístolas morales a Lucilio, 111.2

  • Julio 28

    Julio 28

    Reconoce tus privilegios Los hombres son unos más agudos y otros más obtusos, y criados unos en mejores costumbres y otros en peores, siendo unos de peor carácter o natu-ral, necesitarían mayor número de demostraciones y mayor argumentación para aceptar estas opiniones y quedar modelados según ellas, igual, creo, que los cuerpos enfermizos necesitan mucho mayor cuidado para estar bien. MUSONIO RUFO, Disertaciones, 1.3.1-5

  • Julio 25

    Julio 25

    ¿Qué dice tu epitafio? Cuando veas su pretexta ya ostentada en ocasiones frecuentes, su nombre célebre en el foro, no los envidies: eso lo alcanzan con prejuicio de su vida... A algunos, antes de que ascendieran a la cima de su ambición, los ha abandonado la vida en los preliminares de la lucha; a otros, cuando habían trepado a la más alta dignidad gracias a mil indignidades, les ha venido el funesto pensamiento de que han trabajado para el epitafio de su tumba. SÉNECA, Sobre la brevedad de la vida, 20